Hay delincuentes que además de robarte tu dinero, te roban tus sueños. El boom inmobiliario no solo trajo consigo oportunidades para que las personas puedan adquirir propiedades a costos accesibles, también, para que seas una víctima más de las estafas inmobiliarias y estos se aprovechen de la ignorancia e inocencia de algunos compradores que no saben del tema.
En Perú, las familias son propensas a sufrir estafas inmobiliarias porque desean adquirir lotes en la capital. Movidas por el deseo de trabajar o desarrollarse en el céntrico oportunismo limeño, comprar una propiedad equivale a jugar con un cuchillo en la oscuridad, nunca sabes lo que te tocará.
En este artículo te explicaremos las modalidades que las mafias usan para quitarte tu dinero, todas ellas pueden ser detectadas a tiempo y ser combatidas si tenemos conocimiento básico de las normas del Derecho Inmobiliario registral estipuladas en el Código Civil, aquí: https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/4034057/2.pdf
Principales tipos de fraude a tener en cuenta
- Anuncios falsos: Aprovechando de sus conocimientos cibernéticos, el estafador replica un anuncio de la web y lo publican en otro lado, poniendo datos falsos de contacto para fingir ser el agente o el dueño. Al ser contactados, el delincuente pedirá dinero de la fianza o un monto adelantado.
- Estafa desde afuera: El “propietario” le menciona al contacto que está fuera del país, imposibilitando el recorrido obligatorio que se debe hacer antes de una compra. El estafador manipulará la confianza del cliente al prometer que enviará las llaves del local si realiza un embolsamiento por adelantado.
- Datos personales: La estafa clásica. Al tomar datos personales como los nombres y apellidos, la tarjeta de crédito y otros documentos que contengan información vital del comprador, este aprovechará en vaciar las cuentas bancarias.
- “Prestamistas”: Las hipotecas son su principal arma, las elevadas tasas de interés su garantía. Aprovechando de la vulnerabilidad económica de personas desesperadas por comprar un departamento o personas mayores con escaza información en este tipo de compras, estos dizques prestamistas se ríen en la cara de sus acreedores.
- Título inmobiliario: Utilizando documentos falsos, el estafador adquiere una identidad “fachada” y finge ser el propietario del inmueble. El cliente al morder el anzuelo estará obligado a aprobar las disposiciones del “propietario”, aceptando hipotecas mientras que el verdadero propietario deja con la deuda al nuevo arrendador.
¿Cómo combatir hoy en día esta modalidad? evita las estafas inmobiliarias
Lo ideal sería ir a Registros Públicos, una entidad jurídica encargada de publicitar derechos de propiedad, derechos sobre bienes, negocios y diligencias judiciales, ahí el adquiridor de la propiedad podrá verificar si el inmueble existe o se encuentra registrado correctamente. Aunque algunas veces los datos fallan o no están en disposición para el consultor, es preferible buscar respuestas por tu propia cuenta.