Lima acogió a un gran número de migrantes provenientes de diferentes partes del Perú durante la década de los 40. La crisis ocasionada por la escasez de productos importados de Europa colapso indefinidamente la economía de las provincias dependientes en ese entonces del puerto del Callao. A raíz de este problema, familias enteras decidieron viajar en busca de oportunidades.
La movilización interna no solo aumento demográficamente a la capital, también, aceleró drásticamente a la industria y el comercio. El ingenio peruano se las arregló para fabricar productos similares a las piezas originales. En 1945, la economía mejoró considerablemente a la par de la apertura de locales comerciales, centros improvisados que se perfeccionaron con el tiempo para albergar a un número de trabajadores y comerciantes.
Al día de hoy, Lima todavía es el departamento con más afluencia comercial en el Perú. La nueva crisis provocada por la pandemia de COVID 19, obligó a las personas buscar la manera de autosustentarse. Por eso, al alquilar un terreno es en su punto máximo ya que, los limeños optan por abrir negocios propios que les otorgue ganancias y les de seguridad económica a futuro.
Los locales comerciales son una excelente fuente de ingresos para el arrendador y el comprador. El primero se beneficia por el pago que recibe del alquiler del inmueble y el segundo, por las entradas diarias adquiridas gracias a los servicios que brinda. Así que, si piensas invertir en alquilar un terreno comercial no lo dudes, esta puede ser una oportunidad que no puedes desperdiciar.
¿Qué es un local comercial?
Los locales comerciales son terrenos cuadrados ubicados en zonas estratégicas, con desarrollo económico constante que asegure una inversión conveniente para la apertura de negocios.
Con la variedad de negocios que existen actualmente, cada local comercial se debe amoldar a la necesidad del cliente que lo alquila. Antes de hacerse con uno, el encargado debe percatarse de la posibilidad de crecimiento que este le otorgará, consolidándose dentro del área comercial de la zona.
No obstante, como toda inversión, adquirir un local comercial implica cierto nivel de riesgo. Al tratarse de un bien inmobiliario en el que se destinará una parte importante del capital, lo recomendable es acercarse a un experto en la materia.
Ventajas
- Revalorización a futuro: Los locales comerciales son igual que los vinos, con el tiempo aumentan su valor. El riesgo se presenta cuando el comprador toma una decisión apresurada. Antes de alquilar un terreno comercial, estudia la zona y como mencionamos antes, llama a un experto del tema.
- Fácil de mantener: Los locales comerciales deben tener sí o si los servicios básicos que toda vivienda tiene, hablamos de luz, agua e internet, con estos dotes, tu local comercial estará seguro. No olvidemos la limpieza que se debe realizar cada cierto tiempo. Con una buena administración, mantener el negocio será pan comido.
- Rentabilidad segura. Los planes a largo plazo van muy bien con las operaciones de bienes raíces. Los locales comerciales te otorgarán rentabilidad segura gracias a las ganancias que generará el servicio que ofrezcas. Dependiendo de las dimensiones del local, podrás acceder a ciertas facilidades económicas, claro que, eso va acorde a la situación económica en la que te encuentras. .
- El dinero se genera solo. Puede sonar utópico, pero en el caso de terrenos comerciales es verdad. El dinero que has invertido en comprar el lote se irá incrementando con el tiempo, gracias a la revalorización del inmueble. Lo importante es saber en qué momento vender. Debes comprar el lote cuando el precio está por debajo del valor de mercado. El éxito está en saber hacer este análisis de valor, es decir a la capacidad de hacer negocio. Es importante saber diferenciar el valor del precio. Una cosa es el valor del terreno como negocio y otra es el precio por m2.